La inmensa (y millonaria) industria de la moda se reinventa con una filosofía más ética y responsable, que toma distancia de la cultura de consumo constante y caprichosa. Hablamos de la moda circular, un concepto que invita a reflexionar sobre el ciclo de nuestra ropa y en especial a promover una industria que circula -de ahí su nombre- y sea responsable en todo sentido.

¿De dónde viene lo que vestimos? ¿Quién lo hizo y bajo qué condiciones? ¿Qué pasa con nuestra ropa cuando la desechamos? ¿Estamos pagando un precio justo por ese producto? Esas son algunas de las preguntas que invita a plantearse la moda circular y a partir de ellas rediseñar nuestro comportamiento de consumo y el de los productores.